La Red de Defensa del Consumidor pidió hoy al gobierno de Nicaragua declare estado de emergencia energética y pase al Estado la distribución de energía eléctrica, actualmente en manos de la empresa español Unión Fenosa.
La Red de Defensa del Consumidor, no gubernamental e integrada por miembros de la sociedad civil, demandó al gobierno que preside el sandinista Daniel Ortega 'intervenir' a Unión Fenosa, que opera en Nicaragua desde hace siete años.
Ortega, actualmente de gira internacional, recibió al inicio de su gobierno plantas de generación de energía de Venezuela, pero estas, con sus 60 megavatios de producción, no alcanza a atajar el déficit.
La Red responsabiliza a Unión Fenosa de los constantes cortes de energía que desde abril del año pasado, con algunas interrupciones, afectan a miles de nicaragüenses por períodos de cuatro a diez horas diarias.
Según Ricardo Osejo, directivo de la Red, se debe intervenir a la empresa española porque, a su juicio, ha incumplido con su plan de inversión, no brinda buen servicio a la ciudadanía y tampoco compra energía en el mercado centroamericano para reducir los apagones.
'Unión Fenosa no está preocupada por dar energía a Nicaragua', agregó.
Las distribuidoras Disnorte y Dissur, propiedad de Unión Fenosa, informaron hoy de que los apagones continuarán en todo el país, por un déficit en la generación de energía, que alcanza los 100 megavatios por hora, que está fuera de su alcance.
El portavoz de Unión Fenosa, Jorge Katín, rechazó, sin embargo, que esa empresa no esté haciendo esfuerzos por comprar energía en el mercado centroamericano y que esté incumpliendo con el contrato de concesión.
Aseguró que Unión Fenosa buscó, ayer lunes, comprar 30 megavatios de energía en el Ente Operador Regional (EOR), sin embargo la oferta estaba restringida y solamente pudieron comprar los 10 megavatios disponibles, de Guatemala.
'Para hoy presentamos la misma oferta, pero hasta ahora sólo hemos podido contratar 15 megavatios-hora', añadió.
Nicaragua enfrenta esta semana una crisis energética ocasionada por la salida repentina de una unidad de la Planta Nicaragua, parte de la Generadora Occidental (Geosa), de capital privado, que genera 50 megavatios de energía.
También porque aún no entra a funcionar la planta Momotombo y las plantas hidroeléctricas, ubicadas en lago Apanás, no están generando a toda su capacidad.
Tampoco los ingenios azucareros, que a base del bagazo de la caña de azúcar generaban hasta 60 megavatios de energía, están aportando al sistema interconectado debido a que terminó la zafra.
La demanda nacional de energía es de 496 megavatios, y a pesar de que la capacidad instalada es de 660 megavatios y la efectiva de 522 megavatios, la contratada es de 426 megavatios por problemas en la generación, según ha indicado repetidamente Unión Fenosa.
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