El grupo formado por Energías de Portugal (EDP) y su filial asturiana HC Energía (Hidrocantábrico) forman el tercer «operador principal» del mercado de la electricidad, conforme al nuevo listado que, sobre los protagonistas centrales del negocio energético, elabora cada año la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
EDP-HC da el salto a esa tercera posición y queda sólo por detrás de Endesa e Iberdrola, debido a que, por primera vez, en la determinación de los operadores principales o dominantes se ha tenido en cuenta el conjunto del mercado ibérico al determinar las cuotas de cada empresa. Hasta 2006, cuando el listado se ceñía al mercado español, Hidrocantábrico figuraba como cuarto operador principal.
Y la nueva posición en la que figura la portuguesa EDP tendrá consecuencias societarias. La condición de operador principal implica que la empresa tiene limitada la posibilidad de participar en otra que tenga la misma consideración para evitar el riesgo de actuaciones concertadas. En ese caso está Iberdrola, que posee el 10 por ciento de EDP. Presumiblemente, como informó ayer el diario económico «Cinco Días», la decisión de la CNE impedirá a Iberdrola, que ya está fuera del consejo de administración de EDP, ejercer derechos políticos por encima del 3 por ciento en la junta general de accionistas.
La relación de operadores eléctricos principales aporta otra novedad de alcance: Enel-Viesgo, antes quinto por detrás de Hidrocantábrico, queda fuera de la lista y se incorpora Gas Natural. Esa decisión allana caminos para Enel en Endesa. El grupo italiano, al caerse del grupo de los mayores operadores, no verá restringidas sus atribuciones societarias en la primera eléctrica nacional, de la que ya compró de hecho el 24,9 por ciento.
EDP-HC da el salto a esa tercera posición y queda sólo por detrás de Endesa e Iberdrola, debido a que, por primera vez, en la determinación de los operadores principales o dominantes se ha tenido en cuenta el conjunto del mercado ibérico al determinar las cuotas de cada empresa. Hasta 2006, cuando el listado se ceñía al mercado español, Hidrocantábrico figuraba como cuarto operador principal.
Y la nueva posición en la que figura la portuguesa EDP tendrá consecuencias societarias. La condición de operador principal implica que la empresa tiene limitada la posibilidad de participar en otra que tenga la misma consideración para evitar el riesgo de actuaciones concertadas. En ese caso está Iberdrola, que posee el 10 por ciento de EDP. Presumiblemente, como informó ayer el diario económico «Cinco Días», la decisión de la CNE impedirá a Iberdrola, que ya está fuera del consejo de administración de EDP, ejercer derechos políticos por encima del 3 por ciento en la junta general de accionistas.
La relación de operadores eléctricos principales aporta otra novedad de alcance: Enel-Viesgo, antes quinto por detrás de Hidrocantábrico, queda fuera de la lista y se incorpora Gas Natural. Esa decisión allana caminos para Enel en Endesa. El grupo italiano, al caerse del grupo de los mayores operadores, no verá restringidas sus atribuciones societarias en la primera eléctrica nacional, de la que ya compró de hecho el 24,9 por ciento.
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