El Consejo de Ministros aprobó hoy un Real Decreto sobre el fomento de la cogeneración (producción combinada de calor y electricidad) de alta eficiencia con el objetivo de incrementar la eficiencia energética y el ahorro en el consumo de energía primaria en España.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, explicó que la nueva normativa, que traspone la directiva europea 2004/8/CE, se complementará con las 'políticas de apoyo a las energías limpias' diseñadas por el Ministerio de Industria.
Este departamento ultima el nuevo decreto sobre la retribución que recibirá la producción eléctrica del régimen especial (energías renovables y cogeneración).
De la Vega destacó que la cogeneración es una fuente energética con una 'alta eficiencia' que comporta 'importantes beneficios medioambientales' por sus menores emisiones a la atmósfera de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero.
Por cogeneración de alta eficiencia se entiende aquella que consigue un ahorro de energía primaria del 10 por ciento respecto de la que hubiera sido necesaria para generar de forma separada una cantidad igual de calor y electricidad.
La norma aprobada hoy encomienda a Industria la elaboración de un análisis del potencial de España en la aplicación de la cogeneración de alta eficiencia y un informe sobre la evolución del sector y los procedimientos de autorización de instalaciones para racionalizarlos y simplificarlos.
También establece el procedimiento de cálculo de la electricidad producida con esta tecnología y del ahorro que ha supuesto, con el objetivo de que las estadísticas europeas sean homogéneas, y regula la información que recibirán los clientes en sus facturas de la luz sobre el peso de cada fuente primaria de energía en el conjunto de la electricidad suministrada.
Las empresas distribuidoras y comercializadoras deberán indicar la contribución de las distintas fuentes energéticas en el conjunto de la electricidad que vendieron el año anterior, así como su impacto ambiental en cuanto a emisiones de CO2 y residuos radioactivos.
El Real Decreto insta a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) a establecer un formato homogéneo y fácilmente comprensible para los consumidores con la información que las empresas deberán incluir en las facturas.
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